sábado, 19 de noviembre de 2011

TRIUNFO Y TRAGEDIA "The Ray Mancini Story "





Hay heridas que nunca cierran. La muerte de Kim es una de esas heridas, un acontecimiento muy triste del pasado que nunca será olvidado. 25 años es mucho tiempo para seguir recordando, en especial si es algo tan triste. Pero el hombre que promocionó la última pelea de Kim aún necesitaba oír lo que Mancini tenía para decir antes de permitir que se utilicen las grabaciones de la pelea para hacer un documental sobre el ex campeón del peso ligero.
Después de todo, ¿Quién quiere revivir esos momentos?

Si hubieses estado al lado del cuadrilátero aquella calurosa tarde detrás del Caesars Palace, con el sol que pegaba muy fuerte y con Mancini que estaba derrotando a un valiente púgil coreano que había sido nombrado de manera errónea el probador numero uno del mundo para el título del peso ligero mundial del que era dueño Mancini, ¿Necesitarías verlo otra vez? La tristeza fue tan grande que no considero que se necesite ver un video que nos haga recordar cómo nos sentimos.

Arum, quien se había negado rotundamente a la transmisión de ese video durante todos estos años, le dijo a Trampler que si Mancini quería que se emitiera el video, necesitaba oírlo del mismo Mancini.

"Le dije a Ray después de la pelea que nunca iba a dejar que se transmita ese video, y mi intención es seguir con esa postura", dijo Arum . "Si Ray me lo pidiese, lo haría. Pero es algo que quisiera volver a ver".

Lo que ocurrió durante la soleada tarde del 13 de noviembre de 1982, cambió la vida de ambos boxeadores y el futuro del boxeo. Cuando terminó, Kim quedó en coma, nunca despertó y cinco días más tarde murió en el Desert Springs Hospital de Las Vegas.

Ray Boom Boom Mancini no fue Boom Boom nunca más. Nunca más fue el boxeador agresivo de aquellos días.

El boxeo tampoco volvió a ser el mismo, con la decisión del CMB de bajar las peleas de 15 rounds a 12. Años más tarde la AMB y la FIB hicieron lo mismo, y cuando se creo HBO en 1988, los 12 rounds ya eran la norma establecida.

Las repercusiones fueron aún más graves. El réferi, Richard Greene, se suicidó unos meses después por razones que aún permanecen sin ser aclaradas. La madre de Kim hizo lo mismo cuatro meses después de la muerte de su hijo, algo que hizo pensar si el boxeo era realmente un deporte o un acto de salvajismo que ya no tenia lugar dentro de una sociedad civilizada.

Kim era un púgil valiente, pero no tenía las condiciones para tener el primer lugar que la AMB le había dado. Mientras sus récords eran 17-1-1, contaba con un solo nocaut y nunca había enfrentado a púgiles de la fuerza de Mancini.

El campeón ya había enfrentado a Alexis Arguello en una pelea por el título que el joven Mancini perdió, pero aún así dejó en claro que estaba preparado. Seis meses más tarde tuvo una segunda posibilidad y no falló. A pesar de haber parado la pelea temprano, Mancini derrotó a Arturo Frías y de esa manera se adueñó del título, y después barrió a su primer retador, Ernesto España, en seis asaltos. Su superioridad ante Kim, quien aún no había demostrado sus habilidades, era evidente, y su ventaja fue aún mayor cuando Kim tuvo que trabajar duro para bajar a las 135 (peso limite) en los días finales acercándose al encuentro.

Kim consiguió llegar al peso. Y ronda tras ronda su reacción ante una brutal golpiza por parte de Mancini, fue la de un verdadero púgil, él lo enfrentaba otra vez. Volvía a encarar a su oponente a pesar de no tener demasiadas esperanzas, y devolvió lo suficiente como para que Greene no haya podido justificar el hecho de meterse en la pelea para parar la seguidilla de golpes en el round 13, cuando Mancini le aterrizó a Kim 40 golpes que no fueron devueltos.

Más adelante, el ex campeón mundial, Sugar Ray Leonard, quien estaba transmitiendo junto con Tim Ryan para CBS, dijo, "Realmente pensé que ya estaba totalmente agotado, pero de repente me hizo cambiar de opinión".

La valentía de Kim nunca estuvo en duda. Se le estaba yendo la vida en la pelea pero se negaba rotundamente a rendirse, hasta que cuando comenzó el asalto 14 y su cuerpo ya no podía soportar más golpes. Mancini le aterrizó un golpe al cuerpo y después un golpe derecho en el caballete de la nariz. En ese momento, un Kim mareado, tambaleo hacia atrás y recibió una segunda combinación, siendo el último un golpe derecho que hizo que caiga de espaldas. Greene finalmente tenía la excusa para parar la pelea y así lo hizo, mientras Kim intentaba pararse.

Se desplomó en su rincón muy poco después de que la pelea fuese parada y se lo retiró del cuadrilátero en una camilla. Después cayó en coma.

Mas tarde se comentó que en el espejo de su habitación del Caesars estaban pegadas las proféticas palabras: "Matar o morir". Finalmente, fue el triste destino de Duk Koo Kim.

Casi de inmediato, después de lo ocurrido con Kim fue evidente lo que ocurría con Ray Mancini, quien tan solo tenia 21 años, Boom Boom ya no iba a ser el mismo, rezó y pensó mucho acerca de lo ocurrido hasta que finalmente declaró: "Estoy muy triste, siento mucho que haya tenido que pasar algo así. Cuando lo piensas, sabes que en nuestra profesión puede llegar a ocurrir, pero me duele mucho haber formado parte de ello...

No me culpo por ello, pero tampoco me quito toda responsabilidad al respecto. No lo sé. Soy una persona Cristiana y acudo a mi fe y a Dios, y considero que todo pasa por alguna razón. Seguiré rezando& seguiré rezando con la esperanza de poder recibir alguna respuesta. Realmente no sé qué pensar en este momento.

"Es muy difícil para mi. Estoy como paralizado. Rezo por él. No estoy pensando en mis peleas, en lo que vendrá. Necesito saber qué pasara con Kim& aunque sé que es inevitable. Pude haber sido yo. Fue una pelea muy reñida".

Al lado de Mancini estaba el reverendo Tim O'Neill, quien había viajado con él desde Youngstown. Los dos pasaron horas hablando acerca de lo acontecido. No fue fácil encontrar respuestas pero finalmente llegó el momento de aceptar lo que había pasado. Mancini siguió con su carrera, ganó varias veces, entre ellas un feroz encuentro que fue detenido en el tercer asalto ante Bobby Chacón, quien ya no se encontraba en su mejor momento.

Pero dentro del lapso de dos años perdió su titularidad ante Livingston Bramble y nunca más peleó con la agresividad que demostró ante Kim.

Mancini siempre negó que la tragedia de Kim y su retiro hubiesen estado relacionados y de hecho intentó regresar sin éxito dos veces tras su retiro en 1985 para demostrarlo. Pero Arum vio la llama que brillaba y se apagó aquella tarde en Las Vegas.

"Nunca volvió a ser el mismo de antes", dijo Arum, quien fue el promotor de todas las peleas importantes de Mancini. "No tenía el mismo entusiasmo. Nunca más tuvo la misma garra para pelear".

Mancini no fue el único que se preguntó cómo seguir después de lo acontecido. Arum pidió que se suspendan los encuentros durante algunos meses mientras que una comisión estudió la manera de hacer que el deporte sea más seguro.

El CMB bajó la duración de los enfrentamientos de los tradicionales 15 rounds a 12, diciendo que un estudio había demostrado que la mayoría de los púgiles sufrían las lesiones mas serias durante esos últimos asaltos. Fueron medidas que de haberse tomado antes hubiesen cambiado la historia del deporte, ya que muchas grandes victorias se definieron durante esos últimos rounds. Si la primera pelea de Leonard ante Thomas Hearns hubiese sido de 12 rondas, hubiese ganado Hearns, si la primera pelea de Rocky Marciano enfrentando a Jersey Joe Walcott hubiese sido de 12 rondas, se hubiese retirado como el único campeón del peso pesado invicto en la historia del boxeo.

Y la lista de cómo hubiese cambiado la historia del deporte sigue, pero la misma decisión del CMB fue adoptada cinco años después por otras organizaciones.

Cuando murió su hijo, Yang Sun Nyo voló a Las Vegas y pido que los órganos de su hijo sean donados para trasplantes, "La razón de mi decisión es que de esa manera mi hijo seguirá viviendo en este mundo", dijo.

Sus riñones fueron trasplantados, pero según fuentes del hospital, un paciente que originariamente había aceptado el corazón de Kim decidió más tarde que no iba a poder vivir con toda la publicidad al respecto", y el corazón nunca fue donado.

Algunos años más tarde, un músico llamado Warren Zevon escribió una canción titulada: "Boom Boom Mancini". La siguiente es una parte de la letra de la canción:

Cuando le preguntaron quién era el responsable

Por la muerte de Duk Koo Kim

Dijo, "Alguien debió haber parado la pelea", y me dijo que fue él.

Hicieron comentarios hipócritas al respecto.

Pero el nombre del juego es recibe un golpe y devuélvelo.

Apúrate para llegar a casa

Boom Boom Mancini se enfrentará a Bobby Chacón.


De hecho, Mancini nunca dijo que la pelea debió haber sido parada, como tampoco lo dijeron quienes observaban la pelea al costado del ring, quienes también afirmaron que la negativa de Kim para retirarse lo hizo imposible hasta que cayó al piso.

Irónicamente, ambos se convirtieron en extrañas estrellas de la cultura pop. Se hizo una película y una canción de 14 minutos (uno para cada ronda) sobre la vida de Kim en Corea mientras que Mancini tuvo una corta carrera en Hollywood.

Cuando se subió al cuadrilátero detrás del Caesars aquel día, Mancini ya era un buen prospecto para Hollywood, un joven con buena apariencia, una gran sonrisa y una emociónate historia de cómo hizo realidad el sueño que nunca pudo alcanzar su padre.

Cuando dejó el ring, era un campeón triste que había aprendido lo mucho que puede lastimar el dolor. Y dos años después dejaba el boxeo: "Había perdido la pasión. Aún quería pelear, pero no quería entrenar".

Se retiró pensando que sería una celebridad de Hollywood, pero pronto se dio cuenta de que su padre, Lenny, a quien se le había frustrado su propia carrera en el boxeo tras sufrir una lesión durante la segunda Guerra Mundial, tenía razón cuando le decía a su hijo, " Un día estarás en los titulares y al día siguiente serás olvidado".

No fue una caída tan drástica, pero durante la noche de 1989 cuando hacía su regreso en Reno, enfrentando a Héctor Macho Camacho, en una pelea que no resultó bien para Mancini, dijo: "Estuve debajo de la luz por un momento, pero la luz se movió. Quiero volver a estar debajo de la luz. Los productores y agentes me dijeron que si peleaba, podía volver a tener el lugar que antes ocupaba".

"Solía revelarme ante esto, en Hollywood todo se trata acerca de quién está recibiendo toda la atención y quien no. No me gusta eso. No entiendo ese negocio. No es que sea naíf, pero por un lado tienes a Larry Holmes, campeón durante años, o a un comediante como Red Buttons, y por el otro tienes a William Perry a... a... que surgió hace días y recibe ofertas por millones de dólares. Y dos años más tarde, nadie lo recuerda.

"Hace un año, quise ir a ver una pelea. Pagué mi entrada y me senté en la fila 15. Después de que la gente comenzó a hablar acerca de esta pelea (ante Camacho) recibí un llamado de Caesars, el año pasado. Dijeron que estaban interesados, que tenían entradas de la pelea Leonard-Lalonde para mí, y una habitación.

"Uno de mis amigos me dijo creo que estás de vuelta. No me agrada pensar de esa manera, pero es cómo funciona. No importa lo que pase, no fue un error (volver siete años después de la tragedia de Kim). No tendré que preguntarme qué hubiese pasado, con mostrarte ya tienes algo ganado".

Para Duk Koo Kim, fue toda la victoria que pudo conseguir.

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